Eliane Karp declaró el último martes ante la Fiscalía Penal 48 de Lima que la casa de Camacho que aparecía a nombre de su hija Chantal volvió a manos del expresidente y líder de Perú Posible, Alejandro Toledo.
La exprimera dama indicó que en diciembre del 2000 cedieron la propiedad ubicada en la Urbanización Camacho a su hija a través de un anticipo de herencia, pero que hace aproximadamente una semana Chantal decidió revertir esta acción legal en forma permanente y vitalicia.
Asimismo, Karp aseguró que ella y su esposo se vieron obligados a ceder dicha propiedad a Shantal un año antes de que Toledo sea electo presidente, a fin de salvaguardar su patrimonio, ya que en esa época eran perseguidos políticos.
Según el abogado Mario Amoretti, esta maniobra sería una estrategia de la pareja para eludir cualquier responsabilidad penal en la compra de la casa de Las Casuarinas y la oficina de la Torre Omega, relacionados al caso Ecoteva.
Al respecto, Karp también aseguró que no sabe de donde provienen los fondos de la empresa Ecoteva, que es la que financió los gastos millonarios en las adquisiciones de propiedades. Ella además indicó que su labor se limitó a encontrar dichas propiedades por encargo de su amigo Yosef Maiman.