Promotores de los derechos animales solicitaron por las redes sociales que, en el peor de los casos (rabia u otras epidemias) se aplique sobre los perros la inyección letal y otros métodos menos crueles de sacrificio.
Asimismo, consideran que la Ley 56.12 sobre la prevención y la protección de las personas contra los peligros de los perros, se ha convertido en "un exterminio programado de la raza canina en Marruecos".
Esta normativa fue aprobada en la Cámara baja del Parlamento marroquí en 2013.