Joyce Hardin Garrard, una estadounidense que obligó a su nieta de nueve años a correr hasta morir como castigo por mentir, fue sentenciada a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Los fiscales de Alabama, Estados Unidos, demandaron la pena de muerte para Hardin Garrard, quien hizo que Savannah Hardin corriera fuera de su casa durante horas como castigo por mentir sobre comer chocolate.
Testimonios en el juicio mostraron que Savannah Hardin se desplomó y vomitó en el 2012 afuera de su casa luego de pasarse la tarde corriendo y cargando palos. La niña murió varios días más tarde en un hospital luego que fue desconectada de las máquinas que la mantenían con vida.
Durante su juicio sostenido en Alabama, Garrard negó reiteradas veces que haya tenido alguna intención de hacerle daño a la niña e insistió que su intención era ayudar a que su nieta sea la mejor en las clases de educación física en el colegio.
Foto: (AP)