Tras conocerse hoy el asesinato de los 43 estudiantes secuestrados el 26 de setiembre en Iguala, estado de Guerrero, México, el presidente Enrique Peña Nieto prometió continuar los esfuerzos para “el total esclarecimiento” del caso y castigar a todos los que participaron en estos “crímenes abominables”.
Los “hallazgos presentados” por el procurador general de México, Jesús Murillo, según los cuales los 43 estudiantes de Ayotzinapa fueron asesinados y quemados por miembros del grupo criminal Guerreros Unidos para no dejar rastros, “indignan y agravian a toda la sociedad mexicana”, afirmó el mandatario en un acto público realizado en la capital.
“No basta con la captura de los autores intelectuales, detendremos a todos los que participaron en estos crímenes abominables”, añadió.
La noche del crimen, seis personas murieron a tiros a manos de policías y los 43 jóvenes fueron entregados al cártel Guerreros Unidos.