Nathan Grindall volvió a ser expulsado en una nueva edición del torneo de dardos Cash Converters Championship. ¿La razón? Su gran parecido con Jesucristo. Este hombre se ha dejado crecer la barba de tal forma que realmente asemeja a Cristo y no tuvo mejor idea que acudir a las tribunas de la final de este año, pese a que en el 2012 también fue expulsado por esa razón.
Su aspecto no sería gran problema si no fuera porque una multitud de más de 5.000 asistentes al evento empezó a corear su nombre tras verlo en la pantalla grande hace un año. Se generó tal desorden entre la audiencia, que los organizadores del torneo se vieron obligados a pedirle que abandone el recinto.
Pese a esto, la semana pasada intentó volver a ingresar, pero los agentes de seguridad no le permitieron entrar. "Me sentí muy intimidado. El jefe de seguridad me dijo que ya no quieren que se repita lo del año pasado, pero no es mi culpa si me parezco a Jesús", indicó al diario Mirror.