Según reportó el sitio Flight Report, el piloto del Boeing 737-800 de Turkish Airlines con 125 pasajeros a bordo, logró superar el incidente que se produjo en pleno vuelo, aterrizando sin problemas.
Un vocero de la empresa de aviación, dijo que aunque parezca improbable que un ave pueda dañar el fuselaje de un avión de 70 toneladas, es bastante común que este tipo de daños puedan provocarse.
“La nariz del avión está hecha de materiales blandos para minimizar el daño de este tipo de golpes. Por eso, esta es una deformación normal debido a la naturaleza del accidente”, dijo Ali Genc al portal Mashable.
Las aves de las que hay que preocuparse, según indicó el vocero de Turkish Airlines, son aquellas que chocan contra las turbinas o los motores.
