A menudo son llamadas “células zombies”, pero se trata de células senescentes, las cuales se encuentran en todo nuestro organismo y trabajan liberando moléculas nocivas que degradan los tejidos afectando la cognición, aumentando nuestra fragilidad y debilitando nuestro sistema inmune.
El número de estas células aumenta a medida que envejecemos. Las células, con la edad, dejan de crecer y de dividirse, pero se resisten a morir y continúan lanzando una combinación perjudicial de señales biológicas nocivas.
Mientras una persona es joven, el sistema inmune puede eliminar las células senescentes, pero muchas persisten contribuyendo a problemas de salud y enfermedades asociadas con la edad. Por ello, científicos investigan diversas maneras para destruir estas células y detener los problemas de envejecimiento.
¿CÓMO TENER UNA VEJEZ SANA?
Nuestro sistema inmune se encarga de eliminar las células dañadas mediante un proceso llamado apoptosis, pero a medida que envejecemos, nuestro organismo no elimina todas las células disfuncionales, lo que contribuye a un sistema inmune debilitado y otros procesos biológicos menos eficientes.
Por ello, los científicos están buscan nuevos métodos que ayuden a eliminar las células senescentes, con la finalidad de acabar con las enfermedades asociadas a la vejez.
“Descubrimos que un grupo de proteínas diversas liberadas por células zombis pueden funcionar como biomarcadores de senescencia y pueden predecir los resultados de salud en adultos mayores”, explicó la doctora Jennifer St. Sauver, autora del estudio de la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota.
Aunque los estudios han tenido algunos efectos positivos en laboratorio, aún se encuentran en una fase preliminar, por lo que queda un largo camino para que fármacos que eliminen células “zombies” puedan ser usados en humanos.