El exministro del Interior, Rubén Vargas, expresó su sorpresa por la designación del nuevo comandante general de la Policía Nacional, teniente general Raúl Alfaro, en un contexto en que el presidente Pedro Castillo pidió una sanción para el coronel PNP Harvey Colchado, del Equipo Especial, por haber ejecutado el allanamiento a Palacio de Gobierno.
Advirtió, en entrevista con RPP, que el mandatario buscaría “maniatar” al equipo policial que colabora con las investigaciones del Equipo de Especial de Fiscales contra la corrupción del poder, pues también se designó a Segundo Leoncio Mejía como nuevo inspector General de la Policía Nacional del Perú (PNP) y a Marcelo Álvarez como jefe del Estado Mayor de la PNP.
Intereses oscuros
“Resulta que ahora el inspector general que recibió la queja [contra Harvey Colchado] es el nuevo comandante general y eso tiene que preocuparnos, porque el ahora comandante general va en la línea específica de los intereses oscuros del señor Pedro Castillo. Son movidas oscuras que se están dando al interior de una institución tan importante como la Policía Nacional”, indicó.
“Castillo como jefe supremo de las FF.AA. y la Policía tiene esa atribución constitucional y la está ejerciendo claramente para salvaguardar sus intereses tras las pruebas que se están encontrando [con la investigación] del equipo especial de la Policía y el Ministerio Público. Los cambios van en la línea de buscar impunidad y maniatar al equipo de la policía que está haciendo un excelente trabajo”, agregó.
