La plaza San Martín se ha convertido en un escenario donde los carritos eléctricos se han vuelto muy populares entre niños, adultos y parejas que visitan el centro de Lima. Sin embargo, estos vehículos no solo circulan en esta zona peatonal, sino también por las principales calles del cercado, incluso en medio del tráfico vehicular, lo que representa un riesgo para quienes los conducen y los peatones.
El programa "Paren Todo" constató que estos carritos eléctricos, los cuales se han vuelto virales en redes sociales, su alquiler puede ser bastante rentable. Un paseo de 10 minutos puede costar 25 soles para adultos y 10 soles para niños, convirtiéndose en una actividad recreativa muy solicitada por visitantes de la ciudad.
POPULARIDAD SIN CONTROL NI SEGURIDAD
A pesar de su creciente demanda, muchos de estos carritos funcionan sin ninguna fiscalización ni medidas de seguridad. Usuarios defienden la actividad, pero reconocen la necesidad de establecer regulaciones que protejan tanto a los conductores como a terceros en caso de accidentes.
El problema principal surge cuando los carritos eléctricos abandonan la plaza y se desplazan en plena madrugada por las calles del centro de Lima. Incluso menores han sido vistos durante el día conduciendo en medio del tráfico, poniendo en peligro su integridad y la de otros conductores.


