Las torrenciales lluvias siguen causando estragos en varias regiones del país. En la selva peruana, el desborde del río Apurímac provocó cuantiosos daños materiales e incluso puso en peligro la vida de una persona que fue arrastrada por la corriente, logrando salvarse de milagro.
El afectado, quien había llegado junto a otras seis personas para trabajar en los campos de cultivo, fue sorprendido por la fuerza del agua que lo arrastrado varios metros. Personal del Ejército del Perú, que realizaba labores en el VRAEM, intervino de inmediato y logró rescatarlo cuando se sostenía de una palmera para evitar ser llevado por la corriente.
El Comando Especial VRAEM también auxilió a otras personas afectadas por las inundaciones en distintas zonas del distrito de Pichari, en la provincia de La Convención, Cusco.
OTRAS REGIONES AFECTADAS
Mientras tanto, en Chachapoyas, una tormenta eléctrica alarmó a los vecinos, quienes se refugiaron en sus viviendas por temor a ser alcanzados por los rayos, uno de los cuales impactó en una casa. En esta provincia, las lluvias han dejado numerosas familias damnificadas, con viviendas inundadas y calles convertidas en riachuelos.
En la misma provincia, la crecida del río Guabayacu dejó incomunicadas a varias comunidades tras el colapso de un puente de madera, cuya estructura no resistió la fuerza del agua.
En Arequipa, el puente Ernesto Günther estuvo al borde del colapso, luego de que enormes rajaduras en sus bases obligaran a las autoridades a cerrarlo para evitar una tragedia.
Por otro lado, en Ica, las intensas precipitaciones convirtieron las calles en verdaderos ríos. En el distrito de Los Molinos, los vecinos colocaron sacos de arena en un intento desesperado por evitar que el agua ingrese a sus viviendas y cause mayores daños.
