La inauguración del “Puente de la Paz”, concebido como un atractivo turístico que conecta Miraflores con Barranco, ha generado malestar entre los vecinos más cercanos a la obra. Los residentes denuncian que los reflectores del sistema lumínico deslumbran directamente a sus viviendas, impidiendo un descanso adecuado y afectando su vida cotidiana.
Según los testimonios recogidos, las luces blancas y azules instaladas en la estructura provocan dolores de cabeza, fatiga visual e insomnio en las familias del Malecón Paul Harris. “No podemos dormir desde que encendieron la iluminación del puente”, expresaron los afectados, quienes esperan un pronunciamiento oficial de ambas municipalidades.
Desde la Municipalidad de Miraflores informaron que se están tomando medidas para graduar la intensidad de las luces en horario nocturno, aunque todavía no se ha establecido una medida concreta. En tanto, los vecinos reclaman que se respete la normativa de control lumínico y que se priorice la salud de los residentes por encima del impacto estético de la obra.
VISITANTES ACUDEN A PUENTE
Los vecinos esperan que la discusión no se dilate y que se adopten soluciones inmediatas que permitan conciliar el carácter turístico del puente con el derecho al descanso en sus hogares. Mientras tanto, miles de personas visitan diariamente este puente y hasta se toman fotografías destacándolo como un moderno e imponente atractivo turístico.