Una investigación de Panorama reveló el papel clave de Ana María Rosales Goicochea, apodada por la Policía como “La profesora de la droga”, dentro de una red de narcotráfico internacional. Desde su vivienda en Lima Norte, esta mujer grababa y enviaba tutoriales en video para enseñar a compradores en Europa y otros países cómo recuperar cocaína camuflada en productos de exportación, como estatuas de yeso, velas y café.
Los registros fílmicos, que ahora están en poder de las autoridades policiales, mostraban con detalle el proceso químico para “retroceder” la droga, utilizando insumos como amoníaco, gasolina y ácido sulfúrico. El material audiovisual iba dirigido a clientes en Alemania, Turquía, Grecia, Francia y otros destinos, con instrucciones precisas para cristalizar nuevamente la cocaína tras su paso por controles aduaneros.
El pasado 24 de abril, agentes del Comando de Inteligencia Antidrogas de la Policía Nacional allanaron su vivienda y hallaron un laboratorio clandestino con equipos, productos químicos y evidencias de más de 20 envíos internacionales. Durante el operativo también fue detenido Ever Zapata Ramírez, pareja de Rosales y colaborador directo en la red criminal, quien brindó detalles sobre la ruta y precios del narcotráfico.
GOLPE AL NARCOTRÁFICO
La Fiscalía logró que Ana María Rosales cumpla 18 meses de prisión preventiva mientras avanza la investigación por tráfico ilícito de drogas y afectación a la salud pública. Este caso revela cómo las mafias han evolucionado: ya no solo trafican droga, sino que ahora ofrecen asistencia técnica remota, consolidando redes logísticas sofisticadas con “químicos” que forman parte fundamental de su operación criminal global.