En nuestro país los accidentes de tránsito por problemas técnicos son elevadísimos, por lo que no es raro ver una mafia que opere alrededor de los certificados de revisión técnica.
Estos negociados vergonzosos sirven para permitir que chatarras automovilísticas pasen la certificación del Ministerio de Transportes. Peor aún, se los puede pedir por delivery, donde solo se necesita mandar la foto del auto y se coordina todo por Whatsapp, o pagando una coima.
Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), un promedio de 3 mil peruanos muere cada año en accidentes de tránsito, de ellos alrededor de 450 perdieron la vida por el mal estado de sus vehículos. Panorama insistió por una respuesta frente a esta corrupción en las revisiones técnicas, pero tanto Sutran como el Ministerio de Transportes y Comunicaciones prefirieron no participar.
