Lima y Callao enfrentan una potencial crisis hídrica ante la falta de lluvias en las zonas altoandinas, responsables de abastecer el sistema hídrico de la capital. La situación preocupa a expertos y autoridades, pues la provincia de Yauli (La Oroya, Junín) y los distritos de Marcapomacocha y Carhuacayán, donde se desarrollan proyectos de abastecimiento, presentan niveles de agua alarmantemente bajos.
PROYECTOS DE ABASTECIMIENTO EN PELIGRO
Las principales cabeceras de cuenca en Marca I, II y III dependen de la represa de Antacoto, cuya acumulación de agua debería estar en su punto máximo para esta época del año. Sin embargo, el nivel actual es insuficiente, agravando la situación de la laguna que abastece de agua a la capital. Este sistema, administrado por Sedapal, es crucial para evitar un cuadro de estrés hídrico en Lima, que podría afectar el acceso al agua potable para millones de ciudadanos.
Esta falta de lluvias en las zonas altas de los Andes podría impactar en el sistema de abastecimiento de agua en Lima y Callao, afectando la vida diaria de sus habitantes y limitando la disponibilidad de este recurso esencial en la región.
EMERGENCIA POR SEQUÍA
La crisis hídrica no solo amenaza a Lima, sino que ya ha llevado al Gobierno de Dina Boluarte a declarar el estado de emergencia en varios distritos de Piura debido a la sequía. La medida, oficializada a través del Decreto Supremo Nº 117-2024-PCM, permitirá implementar acciones excepcionales y urgentes en Piura durante los próximos 60 días, con apoyo del INDECI y ministerios como Salud, Educación y Vivienda.
Estas acciones buscan mitigar el alto riesgo de desabastecimiento, supervisando la implementación de medidas que respondan a la falta de agua en esta región del norte del país. La emergencia en Piura es una advertencia de los retos hídricos que enfrenta el Perú y un llamado de atención sobre la necesidad de gestionar de manera eficiente los recursos hídricos en todo el territorio nacional.
