Puno ha registrado una pérdida económica de aproximadamente 230 millones de soles debido a la cancelación de la Fiesta de la Candelaria por las manifestaciones y bloques que se desarrollan en la región.
Así lo reveló Francisco Aquise, presidente de la Cámara de Comercio de Puno, quien además dijo que 300 mil familias que se dedican al comercio y al turismo se han visto perjudicadas por la convulsión social que se vive en las calles.
“No hay tránsito terrestre ni aérea. La conectividad como la custer es solo para desplazamientos de estudios y de algunas actividades. Los hoteles están sin operaciones, se han dado varias cancelaciones”, señaló Aquise.
Asimismo, el funcionario señaló que están prácticamente en una “situación de aislamiento” debido a las protestas, lo que provocó un descenso importantes de la visita de turistas, sobre todo de extranjeros.
“En el turismo interno y el turismo receptivo se afectó al 100%, las actividades de turismo desde enero están paralizadas. Tenemos más de un millón de habitantes, de ahí el 30% tiene un impacto horizontal con el turismo”, enfatizó.