Documentos de Inteligencia precisan que en abril pasado, se construyó dentro de dicho centro penitenciario, una cancha de fulbito, que permitiría el acceso a un antiguo túnel que existe dentro de los pabellones 1A, 6A y 4B.
El conducto, que admitiría una masiva fuga y que estaría siendo acondicionado en estos momentos por los reos, fue construido en 1990 y permitió la huida del cabecilla del MRTA, Víctor Polay Campos y de otros 47 subversivos, para planear su fuga.
Un agente penitenciario, cuya identidad no fue revelada, dijo a un medio local que “siempre se escuchaban sonidos en el suelo y solamente en las noches”. Además, el INPE halló un forado en una de las duchas en el que se esconderían armas.
El jefe del INPE, José Luis Pérez Guadalupe, reconoció los informes y dijo que están estudiándolos para evitar una posible fuga. Cabe mencionar que Inteligencia de la Policía alerta que podrían escapar hasta 400 de los 1,600 internos de dicho centro penitenciario.