Las celebraciones de Navidad y Año Nuevo suelen estar marcadas por reuniones familiares, mesas abundantes y cambios en la rutina diaria, factores que muchas veces generan preocupación por el aumento de peso. Sin embargo, especialistas en nutrición advierten que el riesgo de sumar kilos no depende de una o dos comidas festivas, sino de los hábitos que se sostienen a lo largo del año.
“Es más importante lo que haces entre Año Nuevo y Navidad que entre Navidad y Año Nuevo”, explicó la licenciada en Nutrición Laura Romano, quien remarcó que una alimentación equilibrada durante todo el año permite disfrutar de las Fiestas sin culpa. Según la especialista, cuidarse solo en estas fechas no compensa los excesos acumulados ni tampoco una comida puntual arruina meses de buenos hábitos.
En la misma línea, la licenciada María Eugenia Castro, jefa del Servicio de Alimentación del Hospital Italiano de Buenos Aires, señaló que el aumento de peso está vinculado a la repetición de conductas poco habituales durante varios días seguidos. El problema no es un plato en particular, sino la combinación de desorden alimentario, picoteo constante y consumo elevado de alcohol.
CLAVES SIMPLES PARA ATRAVESAR LAS FIESTAS SIN EXCESOS
Las especialistas coinciden en que evitar los extremos es fundamental. Recomiendan no fijarse objetivos irreales como “comer poco”, disfrutar conscientemente de los alimentos preferidos y prestar atención a las señales de saciedad. También aconsejan mantener, en la medida de lo posible, los horarios habituales de comida y armar platos equilibrados que incluyan verduras para aportar fibra y generar mayor saciedad.
Además, limitar el consumo de alcohol y bebidas azucaradas, alternándolas con agua, ayuda a reducir calorías innecesarias. Tras un exceso puntual, la recomendación es dar vuelta la página sin culpa y retomar rápidamente los hábitos saludables, entendiendo que el bienestar se construye con pequeñas decisiones sostenidas en el tiempo y no con restricciones extremas durante las celebraciones.
(infobae)



