En el marco de la mejora continua y con el objetivo de optimizar la gestión de municiones y explosivos durante todo ciclo de vida, el Ministerio de Defensa aprobó la “Directiva General para la gestión de municiones y explosivos que disponen los Órganos Ejecutores del Ministerio de Defensa”, impulsada por la Dirección General de Recursos Materiales del MINDEF, a través de la Unidad Funcional de Material de Guerra.
Dicha norma incorpora las Directrices Técnicas Internacionales sobre Municiones (IATG, por sus siglas en inglés) para la eficaz e integral gestión del material de guerra de las Fuerzas Armadas, en el marco del Sistema Nacional de Abastecimiento. Además, fue formulada en cumplimiento al "Plan Estratégico para la Gestión de Armas Pequeñas, Municiones y Explosivos del Sector Defensa", aprobado en septiembre de 2024.
Asimismo, esta contempla la gestión de las municiones y explosivos durante todo su ciclo de vida, desde el cálculo de necesidades y la adquisición, hasta la disposición final. Precisamente, se establecen procesos estandarizados para el control de inventarios, la seguridad y el almacenamiento, entre otros.
La nueva directiva general también garantiza la trazabilidad del material de guerra. Para ello, los órganos ejecutores del MINDEF deben establecer procesos y procedimientos de trazabilidad que permitan el seguimiento de las municiones y explosivos desde su adquisición hasta su uso/empleo o disposición final.
Adicionalmente, se contempla la ejecución de visitas de supervisión de los polvorines y pañoles pertenecientes a las Fuerzas Armadas, así como la implementación de un Sistema Informático para la Gestión de Armas, Municiones y Explosivos del sector Defensa.
Las disposiciones contenidas en la mencionada directiva son de cumplimiento obligatorio por parte de los órganos ejecutores (Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Ejercito, Marina de Guerra y Fuerza Aérea) y de las unidades de organización del MINDEF, involucradas en el proceso que se regula.
De esta manera, el MINDEF garantiza que las Fuerzas Armadas gestionen las municiones y explosivos con procesos estandarizados, garantizando la disponibilidad y el control, así como la seguridad integral de estos bienes, en el marco de la normativa nacional e internacional, durante todo su ciclo de vida.