A pocos días de la inauguración y en medio de la marcha blanca por el nuevo Aeropuerto Jorge Chávez, surge una nueva polémica tras la instalación de gigantografías que simulan áreas verdes en zonas aledañas.
Las imágenes impresas de hojas y flores, colocadas en muros de la avenida Morales Duárez, principal acceso al terminal, intentan ocultar el paisaje desértico y concreto del verdadero estado del río Rímac.
Canal N captó a varios obreros desplegando estos banners, cuya artificialidad es evidente por los bordes recortados y colores poco realistas, una medida impulsada por PromPerú para "dar color" al entorno marcado por tierra y concreto.
Aguas residuales y acumulación de basura
A pesar del embellecimiento con gigantografías, el entorno del aeropuerto sigue afectado por problemas ambientales como vertimiento de aguas residuales al río Rímac, acumulación de residuos sólidos y quema de basura en áreas cercanas.
Marcha blanca y operaciones controladas
Desde el 15 de mayo, el Aeropuerto Jorge Chávez inició su fase de marcha blanca con cinco aerolíneas internacionales que realizan entre ocho y diez vuelos diarios. Este periodo de prueba permite ajustar sistemas de seguridad y logística antes de la apertura oficial programada para el 1 de junio.
Certificación y congestión vial
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones otorgó la certificación oficial tras comprobar el cumplimiento de estándares de aviación civil y seguridad, habilitando el acceso por la recién rehabilitada avenida Morales Duárez. No obstante, los primeros días han estado marcados por fuerte congestión vehicular en la vía.