El Viernes Santo es una fecha importante para los católicos, marcada por la tradición de ayunar, que implica no consumir carne y optar por una alimentación más ligera. Aunque esta práctica es religioso, expertos del Instituto Médico Europeo de la Obesidad destacan los beneficios para la salud que puede brindar este tipo de ayuno, incluyendo la detoxificación y depuración del cuerpo, así como el fortalecimiento de diversos sistemas orgánicos.
RECOMENDACIONES
Por ello, especialistas recomiendan llevar a cabo un ayuno equilibrado y saludable este Viernes Santo, y optar por una alimentación que aporte todos los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo.
- Desayuno nutritivo: Comenzar el día con un desayuno que incluya frutas ricas en vitamina C, frutos secos, lácteos y miel, para fortalecer el sistema inmunológico.
- Snack a media mañana: Consumir un yogur acompañado de nueces como snack para mantener la energía y la saciedad.
- Almuerzo balanceado: En la comida principal, optar por legumbres como lentejas o garbanzos, que son ricas en fibra y benefician la salud cardiovascular.
- Postre saludable: Tomar un zumo de naranja y zanahoria como postre, ya que es antioxidante y ayuda a mejorar el sistema inmunológico, equilibrar las emociones y reduce la ansiedad.
- Cena ligera: Cenar un caldo de verduras depurativas para eliminar toxinas, además que favorecerán la reparación celular y la meditación interior.