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Domingo, 22 de enero del 2023

Realizan cirugía de alta complejidad a corazón abierto para salvar la vida de adulto mayor

Paciente resistió a una larga operación en la que le colocaron tres bypass cardíacos, y ahora nuevamente puede sonreír.

Foto: EsSalud



A sus 64 años de edad, Carlos Ramos sufría de intensos dolores en el pecho que le impedían realizar sus actividades con normalidad, ni siquiera caminar más de tres cuadras, sintiéndose obligado a dejar de trabajar. Preocupado por estos malestares, llegó hasta el hospital Alberto Sabogal del Seguro Social de Salud (EsSalud), donde supo que la sangre no estaba llegado a su corazón con normalidad. 

“Nuestro paciente tenía comorbilidades severas como hipertensión, diabetes y antecedentes de tabaquismo; además, ya había sufrido un infarto previo hace un año y tenía lesiones de las arterias coronarias”, comentó el Dr. Pedro Rojas Sánchez, cirujano cardiovascular, quien explicó que Carlos estuvo cerca de sufrir un infarto o una muerte súbita en su casa. 

UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD DE VIDA

La situación era muy delicada ya que el paciente presentaba tres arterias coronarias obstruidas. Por ello, los médicos especialistas del Sabogal prepararon una intervención quirúrgica a corazón abierto para colocarle tres bypass cardíacos. Esta era una cirugía de alta complejidad y duró más de cinco horas, pero el paciente resistió. 

“Hemos creado un nuevo camino para que la sangre llegue a su corazón, tomando dos arterias sanas de la parte anterior del tórax para conectarlas con la arteria coronaria y así la sangre circule con normalidad”, explicó el cirujano cardiovascular de EsSalud. 

Esta técnica médica, agregó, ha demostrado tener un buen funcionamiento cuando se utilizan con estos bypass, teniendo una duración de más de 15 años y logrando prologar y mejorar la vida del paciente. 

CUIDE SU CORAZÓN

Casos como los de Carlos suelen ocurrir, principalmente por el descuido de los chequeos preventivos. Por ello, los especialistas recomiendan buscar ayuda médica al mínimo dolor de pecho al momento de realizar actividades cotidianas o falta de aire al caminar, para tener un diagnóstico oportuno, prolongar y mejorar la calidad de vida.

“Al llegar al hospital tenía dolor en el pecho que incluso llegaba hasta mi garganta. Me sentía muy cansado, todo mi organismo comenzó a decaerse. Hoy que me retiro a casa siento que aquí me han dado una nueva oportunidad para vivir, disfrutar de mis hijas y nietos, volver al trabajo, ahora sí cuidando mi corazón”, manifestó Carlos.


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