Según el peritaje hecha a la tubería que descarga petróleo a la refinería La Pampilla en el mar de Ventanilla, arroja que las fallas de ruptura se deberían a una falla de fábrica, debido a que no fue elaborada de acuerdo con los planos de fabricación del año 2013, documentos que fueron presentados por la compañía petrolera Repsol ante el fiscal Ariel Tapia, encargado de investigar el derrame de 11 mil barriles de crudo el pasado 15 de enero de 2021.
“Los planos de fabricación emitidos por Relapasa (Repsol) en 2013, establecen que las boquillas se suelden al PLEM por soldadura a tope con preparación de junta en V para asegurar penetración total, lo cual, no sucedió”, se lee en el documento al que accedió diario La República.
Asimismo, el perito Aldo Valer Morales, encargado por Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) para analizar el caso, señaló que, pese a las fallas de fabricación, las tuberías soportaban las presiones de descarga, las cuales se efectuaban con normalidad.
“Si el PLEM se hubiese fabricado cumpliendo lo establecido en los planos de fabricación de 2013, las cargas derivadas por el desplazamiento del buque-tanque (Mare Doricum) hubieran ocasionado la rotura de las mangueras antes que alguna parte del PLEM. En esa situación, las válvulas check instaladas entre las boquillas y el tren de mangueras, hubiera impedido el retorno de hidrocarburo almacenado en el PLEM y en el ducto submarino”, indica el informe.
OTROS DETALLES
Otra de las causas de la rotura del PLEM fue la presión que le generó el movimiento del buque petrolero Mare Doricum. Según indica, “el punto de conexión ubicado al constado del tanque y a la mitad de la eslora del barco, se desplazó como mínimo 88.5 metros contra la ubicación del PLEM, provocando el doblez de la manguera, y ocasionando el derrame". Asimismo, señala que se deben continuar con las investigaciones para conocer el motivo de la ruptura.
