Los usuarios de las redes sociales han mostrado su indignación ante una reciente campaña de dos empresas que se han unido para concientizar sobre las duras condiciones que viven algunos ciudadanos por el friaje en Puno.
Miles de comentarios han criticado a las empresas por no mostrar empatía ni verdadero interés en el problema del friaje que se vive en algunas zonas altoandinas. Otros comentarios se cuestionaron que se enfríe de manera artificial un sitio para conseguir donativos, cuando esta realidad puede experimentarse en zonas altas en Lima, donde la precariedad es parte del día a día.
Otras críticas iban dirigidas a la intención de las empresas de “experimentar el frío extremo”, en una “casa típica de Puno”. “Cual zoológico humano del siglo XIX, Vick y Real Plaza exhiben la réplica de una casa “típica”. Allí los clientes pueden sentir frío, conmoverse y donar”, escribió el periodista Marco Avilés.
SOBRE LA CAMPAÑA PUBLICITARIA
Las empresas Procter & Gamble (cuyo producto es Vick) y el Mall Real Plaza crearon la campaña “Experiencia de frío extremo” en el cual, recrearon una casa típica puneña que se encuentra entre 3°C y 5°C, la cual se encuentra en el mall Real Plaza de Puruchuco. Aunque el fin es captar donativos, el efecto que ha generado en la población es más negativo que positivo.
De acuerdo a Mónica Nuñez Salas, profesora de la Universidad del Pacífico, esta campaña no solo es una “manifestación de racismo ambiental” sino que “genera la sensación que de que la región altoandina está condenada a la vulnerabilidad y nada se puede hacer más que mandar frazadas, alimentos", etc. Además, indica Núñez, "distrae de la responsabilidad que tiene las instituciones del Estado (…) nos aleja de soluciones reales”, explicó en su Twitter.
Por otro lado, los internautas también mostraron su desazón por la participación de personajes públicos como Gianella Neyra y Maricarmen Marín, que "prestaron su imagen a la construcción de prejuicios con fines comerciales", explicó Núñez Salas.
