Según una fuente militar estadounidense, citada por la agencia Reuters, la unidad que estaría detrás del video son efectivos del segundo y tercer batallón de la fuerza norteamericana que permanecen en Camp Lejeune, Carolina del Norte.
El hecho fue condenado por el jefe y voceros del Pentágono que apenas visualizaron el video exigieron abrir una investigación a la a cúpula de los marines y a las fuerzas desplegadas en Afganistán.
El material audiovisual llega en un momento delicado para el gobierno de Barack Obama, que busca concretar negociaciones de paz entre el gobierno afgano y los talibanes.