Legisladores estatales de Arizona, que lanzaron en Internet una campaña de recaudación de fondos para financiar la construcción de un muro en la frontera con México, dijeron hoy haber reunido 100 mil dólares en los primeros siete días.
El senador estatal republicano, Steve Smith, coordinador de la campaña, señaló que el monto sólo incluye las donaciones recibidas a través de Internet, y aún está pendiente contabilizar e incluir en la cuenta los cheques que han llegado por correo.
El senador hizo el anuncio durante una audiencia este miércoles ante un comité senatorial orientado a la seguridad fronteriza.
Smith es autor y principal promotor de una ley promulgada en abril pasado por la gobernadora de Arizona, Jan Brewer, que autoriza la construcción del muro con base en donaciones privadas, y contempla usar el trabajo físico de reos.
La ley también prevé la creación de un Comité de Seguridad de la Frontera, integrado por miembros del Senado y de la Cámara de Representantes de Arizona, así como sheriffs y funcionarios designados por la gobernadora.
El Comité de Seguridad, que estará encargado de decidir qué tipo de vallas se construirán y dónde, comenzaría a actuar una vez que se asegure un mínimo de donaciones para la construcción de las barreras.
La campaña de recaudación tiene por meta recabar el dinero necesario para cubrir los 131 kilómetros de frontera con México, que permanecen abiertos, luego de que el gobierno federal concluyera en 2009 la construcción de mil 100 kilómetros de muro fronterizo.
En función del material y diseño que se decida utilizar, una milla (1.6 kilómetros) de muro fronterizo cuesta entre 2.6 y 7.4 millones de dólares, incluyendo la mano de obra, un rubro que según los legisladores estatales podría ahorrarse si se usa mano de obra de reos.
Funcionarios de Arizona han recurrido ya con relativo éxito a campañas de recaudación para financiar iniciativas similares.
La gobernadora Brewer recaudó millones de dólares en donaciones privadas a través de internet para cubrir los gastos legales causados por la defensa de la ley antiinmigrante SB1070 que Arizona aprobó en 2010.
La SB1070, que permanece suspendida por orden de una juez federal, autoriza a los policías a detener a personas sospechosas de ser inmigrantes indocumentados, y exige a quienes son residentes legales traer siempre consigo los documentos que avalen su estadía legal.
(Fuente: Agencias)
