Un hombre de 38 años fue arrestado el pasado 3 de julio en la prefectura de Shiga, Japón, tras amenazar con incendiar el santuario Kurumazaki, uno de los más antiguos del país, fundado en 1189. Según informó el Kyoto Shimbun, el sujeto envió docenas de correos electrónicos hostiles al recinto religioso, incluyendo uno que decía: “Ese maldito santuario arderá en un incendio inexplicable cualquier día de estos”.
INSÓLITA EXPLICACIÓN
La causa del ataque fue una imagen publicada en marzo por la cuenta oficial del santuario en X (antes Twitter), donde se mostraba a una sacerdotisa creada con inteligencia artificial. El retrato, de estilo anime, fue criticado por usuarios que consideraron inapropiado el uso de arte generado por IA en contextos culturales y religiosos tradicionales.
El templo cerró su cuenta y pidió disculpas
Aunque el santuario eliminó la imagen el mismo día y luego cerró su cuenta en X, las reacciones no se detuvieron. Los responsables del templo ofrecieron disculpas públicas, explicando que la intención era atraer a visitantes jóvenes al combinar tradición con elementos visuales modernos.
El santuario Kurumazaki es conocido por su fuerte vínculo con las artes escénicas y suele recibir a artistas y seguidores del entretenimiento japonés. Si bien no se registraron daños físicos, el caso ha reavivado el debate sobre el acoso digital y las amenazas contra sitios históricos, sobre todo tras el trágico atentado contra Kyoto Animation en 2019.
De acuerdo con el medio Japan Forward, el detenido no tenía ningún vínculo personal con el santuario y admitió que sus amenazas fueron motivadas únicamente por su rechazo al uso de arte generado por inteligencia artificial.
