Siria e Israel acordaron un alto el fuego, según anunció este viernes el embajador de EE.UU. en Turquía, Tom Barrack, en redes sociales. El pacto fue "acogido" por Turquía, Jordania y países vecinos. Barrack instó a drusos, beduinos y sunitas a deponer las armas para construir "una nueva identidad siria unida".
El acuerdo se produce tras los bombardeos israelíes del miércoles contra edificios gubernamentales en Damasco, donde murieron al menos tres personas. Israel justificó los ataques como protección a la minoría drusa.
Un video oficial sirio mostró el impacto en el Ministerio de Defensa, obligando a un presentador de TV a resguardarse. Estas tensiones se enmarcan en enfrentamientos entre fuerzas progubernamentales y milicias drusas que han dejado decenas de muertos tras la caída de Bashar al-Assad.
Retirada militar y acusaciones
El presidente sirio Ahmed al-Sharaa anunció el miércoles por la noche la retirada del Ejército de Suwayda, donde estallaron combates entre drusos y tribus beduinas. Su gobierno decretó un alto el fuego con facciones drusas y acusó a Israel de intentar "dividir al pueblo sirio" y convertir el país en un campo de batalla del caos.
Diplomacia en región
EE.UU. incrementó esfuerzos diplomáticos ante la escalada. El secretario de Estado Marco Rubio mantuvo este viernes una llamada con su homólogo turco, Hakan Fidan. Previamente, Rubio afirmó en redes sociales que todas las partes aceptaron "pasos específicos" para resolver la crisis, exigiendo el "cumplimiento de compromisos".
