La historia de Emmanuel Macron y su esposa Brigitte Trogneux no ha dejado de causar revuelo desde que se hizo pública. La pareja, que se conoció en un colegio privado de Amiens, al norte de Francia, ha desafiado los convencionalismos desde sus inicios. Él, de 15 años y alumno de teatro; ella, de 39 años, profesora, casada y madre de tres hijos adolescentes.
Pese a las críticas y el escándalo mediático de entonces, se casaron en 2007. Desde entonces, Brigitte Macron ha sido una presencia constante en la vida política del ahora presidente francés, acompañándolo en cada mitin, revisando discursos y consolidándose como una figura influyente, aunque no oficial, dentro del entorno del Elíseo.
Esta semana, un nuevo episodio volvió a ponerla en el centro de la atención pública. Durante una gira presidencial por el sudeste asiático, un video mostró a Brigitte aparentemente empujando el rostro de Macron con la mano antes de descender del avión presidencial. Luego, al bajar juntos la escalerilla, ella rechazó su brazo. Las imágenes desataron todo tipo de especulaciones.
“Con mi esposa estábamos bromeando, como lo hacemos a menudo”, aclaró Macron ante la prensa. El mandatario negó que se tratara de una “pelea doméstica” y pidió calma respecto a las interpretaciones.
Brigitte ha sido blanco de constantes comentarios sexistas y teorías conspirativas, entre ellas, la absurda afirmación de que sería una mujer transgénero, lo que la llevó a emprender acciones legales para defender su derecho a la intimidad. En paralelo, ha sido aplaudida por su elegancia y firmeza, manteniéndose como una figura visible pero sin cargo oficial: en Francia no existe el título formal de primera dama, aunque el Elíseo reconoce su papel como cónyuge del jefe de Estado.
“No tengo influencia política. Tengo muy claro que los franceses eligieron a Emmanuel y no a mí”, declaró a Elle en 2017. Sin embargo, figuras cercanas al gobierno, como el exministro Gérard Collomb, han sugerido lo contrario. “Veíamos que el punto de vista de Emmanuel podía cambiar entre dos reuniones... Entonces pensábamos: mira, Brigitte ha pasado por aquí”, declaró en 2019 a BFMTV.
