Más de 200 militares están retenidos por partidarios del expresidente Evo Morales, tras el asalto a tres cuarteles en el marco de las protestas que comenzaron hace 20 días. Las unidades del Ejército que fueron asaltadas se ubican en la zona del Chapare, en el departamento de Cochabamba.
Tras conocer los hechos, que hasta el momento se mantiene, el presidente boliviano, Luis Arce, exministro de Economía de Evo Morales durante su gobierno (2006-2019), deploró la acción. "La toma de una instalación militar en cualquier lugar del mundo es un delito de traición a la Patria", señaló.
PROTESTAS AUMENTAN
El conflicto en torno a los militares retenidos se produce en el marco de bloqueos de caminos y carreteras en varias ciudades del país, por parte de manifestantes afines a Evo Morales, quienes denuncian que las acciones judiciales contra el expresidente es una persecución política.
Los indígenas también demandan al Gobierno una solución inmediata a la falta de dólares y la escasez de combustible. Las protestas aumentan, otro grupo se declaró, el último viernes, en huelga de hambre. Por el momento no se avizora una solución a corto plazo de este problema.