El gobierno de Canadá dejará de proporcionar seguridad al príncipe Harry y su esposa Meghan Markle, una vez que los duques de Sussex dejen de ser miembros activos de la familia real británica en las próximas semanas, el 31 de marzo.
Según un comunicado de la Oficina federal del Ministro de Seguridad Pública, la Real Policía Montada de Canadá ha estado colaborando con la Policía Metropolitana de Londres en la seguridad del duque y la duquesa de Sussex “intermitentemente” desde noviembre, cuando la pareja inició unas vacaciones de seis semanas en Canadá.
Pero una vez que los duques dejen de ser considerados miembros de alto nivel de la familia real británica, dejarán de recibir seguridad financiada con fondos públicos del gobierno de Justin Trudeau.
Cabe señalar que ya no son consideradas miembros de la realeza de alto rango porque no cumplen con deberes de la reina de tiempo completo, sin embargo, no tienen la restricción de usar su título y eso es lo que más le duele al Príncipe Harry.