En Tailandia, un hombre identificado como Prasarn Homthong, de 38 años, fue encontrado sin vida en su domicilio en la provincia de Bueng Kan, en su intento por mantener caliente a su hija durante la fría noche.
Homthong vivía junto con sus dos hijas, de 8 y 14 años, en una casa de concreto sin terminar y sin calefacción. La familia solo disponía de tres mantas para protegerse del frío y el viento.
Durante la fatídica noche, la temperaturas descendieron bruscamente hasta los 9 grados centígrados. La hija mayor fue a pasar la noche a la casa de un pariente para que su hermana pudiera quedarse con su cobija, pero esta no resultó suficiente, por lo que el padre cubrió a la pequeña con la tercera y última manta, quedándose él únicamente vestido con una camisa y pantalones cortos.
A mitad de la noche, la menor se despertó y le devolvió la cobija, pero no esto no resultó de ayuda y a la mañana siguiente el hombre fue hallado sin vida. El médico forense que certificó la muerte concluyó que falleció por hipotermia.