El pequeño Liam estaba de regreso a casa junto a sus padres cuando una lluvia de piedras los sorprendió en el camino. De acuerdo a las primeras versiones, la familia fue atacada por un grupo de delincuentes que pretendía robarles la moto en la que circulaban. Lo cierto es que una de las piedras impactó en la cabeza del pequeño, de 4 años, y murió después de tres días de agonía. Según advirtió la familia, se trata de una zona donde ya hubo otros ataques similares.
El hecho ocurrió en Argentina. Ricardo Flores, padre de la víctima, contó a los medios que en su intento por evitar el robo no detuvo la marcha cuando empezaron los piedrazos. Pero una vez que consiguió alejarse algunos metros del lugar fue que notó que su hijo tenía sangre en la cabeza.
Liam fue trasladado al Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde los médicos que lo recibieron le diagnosticaron un traumatismo encéfalo craneal producto del golpe y lo operaron de urgencia. El pequeño luchó más de 72 horas por su vida, pero murió el domingo cerca de las 7 p.m.
''Quiero justicia porque mi sobrino es un angelito inocente. Qué necesidad tenían de tirarle con un ladrillo en la cabeza, quiero que pongan cámaras, más luces y más policía. Quiero que esas personas que lastimaron a mi sobrino paguen por lo que hicieron", expresó la tía de Liam.
El dolor también se reflejó en las redes sociales. El club donde la víctima jugaba, subió una foto suya a Facebook y lo despidió: "Hoy lloramos tu partida. El cielo ganó un angelito más, aunque el tiempo que estuviste en esta tierra fue demasiado breve siempre estarás en nuestros corazones y pensamientos Liam. Mandamos desde acá un fuerte abrazo a la familia de Liam. No hay consuelo para tanto dolor. Descansa en Paz, ya nadie podrá hacerte daño. Muchas fuerzas a la familia''.