Durante su catequesis en la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco instó a los fieles católicos a romper los muros y construir diálogos con personas de otras religiosas y los ateos.
“¡Siempre construyendo puentes, siempre la mano extendida, sin agresión! (...) Pidamos hoy al Espíritu Santo que nos enseñe a construir puentes con quienes no creen o tienen otra fe distinta a la nuestra”, sostuvo en su mensaje el Sumo Pontífice.
Además recordó que cuando el apostol San Pablo llegó al Areópago en Atenas y vio toda la ciudad llena de ídolos, observó que “este impacto” con el paganismo lo impulsó a crear un puente para dialogar con esa civilización.
En ese sentido saludó a los peregrinos de franja árabe y pidió a Dios por ellos. "Que el señor cale nuestros corazones a las deyección de los necesitados, los indefensos, los pobres, los desempleados y aquellos que tocan a nuestra puerta en pesquisa de pan, un refugio y el examen de su dignidad”.