Una malformación en los huesos de su mandíbula no le permitía tener una vida plena a Ellie Jones, debido a que no podía cerrar completamente su boca. Esto la llevó a ser víctima de bullying gran parte de su vida.
Su ortodoncista se percató que su quijada dejó de desarrollarse a cuando tenía ocho años. Por lo que tuvo que acudir a un cirujano maxilofacial en Gales, Reino Unido, que le cambiaría para siempre su vida.
Después de una serie de dolorosas operaciones que la dejaron sin poder hablar durante meses, la joven logró un radical cambio que le dio mucha confianza y le hizo por fin sentirse normal.
“Tuve que tener una dieta líquida durante aproximadamente un mes, que fue muy difícil y no podía hablar bien. Tenía que usar un bloc de notas para comunicarme”, contó Ellie Jones, quien esperó 6 meses para ver los primeros resultados de su cirugía