Autoridades de Corea del Sur elevaron hoy su sistema de alerta ante una inminente prueba de misiles que el régimen norcoreano podría llevar a cabo.
Es por ello que voluntariamente miles de jóvenes surcoreanos, algunos con experiencia y otros novatos, se sumaron a la infantería de la Marina de su país, para prepararse ante cualquier ataque.
Listos para afrontar una posible guerra con Corea del Norte, los reclutas surcoreanos volvieron a sus bases en la frontera y desplegaron dos buques interceptores en sus costas oriental y occidental.
De otro lado, las Fuerza Armadas surcoreanas, pusieron en funcionamiento en su frontera con norcorea, un sistema de radar defensivo y otro de alerta anticipada con cuatro aviones de vigilancia.