El artista fue golpeado antes de ser expulsado de Coachella y ahora amenaza con demandar a los organizadores del festival, que anualmente se realiza en Indio, California, Estados Unidos.
El incidente tuvo lugar la noche del pasado domingo durante el show del rapero estadounidense Drake, el mismo donde fue besado por la cantante Madonna y reaccionó con un gesto de asco.
Pese a que Justin Bieber traía todas las credenciales de acceso a la zona VIP, los guardias del evento musical le negaron la entrada alegando que el backstage ya estaba lleno.
La seguridad le pidió al cantante canadiense que se retirara, pero él se negó y comenzó una fuerte discusión, que tuvo su momento más álgido cuando un guardia del evento se acercó al intérprete y le puso las manos en el cuello.
La agresión produjo una pelea de varios minutos entre los custodios de Justin Bieber y el staff de seguridad del festival Coachella, al final el astro del pop fue expulsado del evento.
