Miembros de la Comunidad Nativa Amazónica Bora, en Iquitos, reconstruyeron su maloca, que fue arrasada por fuertes vientos, en el lugar recibían a turistas nacionales y extranjeros durante todo el año.
Según indicaron, en la maloca vendían sus artesanías y mostraban su cultura ancestral a los cientos de visitantes, lo que representa la mayor fuente de ingresos para los residentes de esta comunidad nativa.
La reconstrucción del local comunal fue posible gracias a importantes donaciones, como la entregada por el Coronel Juan Silva Bocanegra. La inauguración de la nueva maloca fue celebrada con música y danzas.