Este miércoles es un día especial para unos y funesto para otros en el mundo del deporte, pues se cumplió un año desde el histórico 7-1 de Alemania a Brasil en las semifinales del Mundial que se disputaba nada menos que con los sudamericanos como anfitriones.
De esta manera los ‘Panzer’ aplastaron sin piedad las ilusiones de Brasil de dejar la copa en casa y convertirse en hexacampeones, en un Mundial que había sido altamente cuestionado por la ciudadanía, con masivas protestas callejeras y feroces disturbios cuyas imágenes siguen frescas.
Este hecho, que se hizo conocido como el ‘Mineirazo’ (similar al ‘Maracazano’ de 1950 donde la ‘Canarinha’ perdió la final contra Uruguay), es otra herida para la torcida brasileña, que no pasa por un buen momento si consideramos su temprana partida de la Copa América.
Es justamente por esto último que Brasil no estará presente por primera vez en la Copa Confederaciones.