Cultura

Hace 1 meses

¡Mamífero marino más grande de la historia fue hallado en la Amazonía peruana!

“Tenemos los dos cetáceos más grandes del planeta: Perucetus, el más grande de los mares; y Pebanista, el más grande de los ambientes acuícolas", señaló el líder de la investigación.

Foto: Andina.



El Perú sigue reescribiendo la historia del mundo. Un grupo multinacional de científicos encontraron el fósil del que sería, hasta el momento, el animal acuático más grande de la historia en habitar ambientes acuícolas.

El hallazgo arqueológico tuvo lugar en la Amazonía peruana, en el río Napo, a la altura de Maynas, región Loreto. “Tenemos los dos cetáceos más grandes del planeta que alguna vez hayan existido en sus propios ambientes: Perucetus, el más grande de los mares; y Pebanista, el más grande de los ambientes acuícolas. Por ambos lados tenemos la corona”, señaló el líder de la investigación, Aldo Benites-Palomino.

GIGANTES MARINOS

El “Pebanista yacuruna”, nombre que se le ha dado a este fósil, era un delfín que habitó hace 16 millones de años la proto-Amazonía. Benites-Palomino encontró el fósil del cráneo de esta especie en 2018, el descubrimiento recién fue publicado en la prestigiosa revista científica Science Advances.

El experto explicó que los restos se hallaron por error, pues esperaban encontrar huesos de cocodrilos. Se estima que el Pebanista yacuruna, cuyo nombre significa ‘delfín demonio de Pebas’, midió más de 4 metros de longitud, un 25% más grande del tamaño actual de los delfines de su especie.

Foto: Andina.

 

NO TIENE PARENTESCO CON EL DELFÍN ROSADO

Por otro lado, los investigadores señalaron que este fósil no tiene parentesco alguno con el delfín rosado (Inia geoffrensis), animal oriundo de la zona, sino que estaría más relacionado con una especie que habita las aguas dulces de Asia. 

“La sorpresa es que Pebanista es un pariente cercano de un delfín que habita los ríos en del sur de Asia, llamado Platanista”, enfatizó Benites-Palomino. El parentesco común queda evidenciado “por el gran desarrollo de sus crestas faciales, unas estructuras óseas usadas para dirigir mejor el sonido que emiten bajo el agua y orientarse en su navegación”, enfatizó.

 


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