En enero próximo se realizarán las elecciones extraordinarias para elegir al nuevo Congreso. Pero si algo se mantendrá igual, de seguro serán las abundantes promesas de los candidatos. Pese a ello, plasmar muchas de ellas sería casi imposible por el poco tiempo que habrá para legislar.
Si en el mejor de las casos el periodo parlamentario se iniciara el 15 de febrero del 2020 y terminara el 27 de julio del 2021, restando los recesos parlamentarios, los congresistas electos solo tendrán 15 meses de trabajo.
Conforme como ha venido trabajando el último Congreso, un año y 3 meses no sería tiempo suficiente para crear leyes que beneficien al país. Para el jefe de Idea Internacional, Percy Medina, los nuevos parlamentarios deberían resolver los temas que han quedado pendientes.
Tales son las dos reformas constitucionales pendientes, sobre la inmunidad parlamentaria y la imposibilidad de que personas con sentencia condenatoria en primera instancia puedan postular. Los congresistas no pueden prometer, de otro lado, hacer obras o dar leyes.
No deje de analizar a detalle las propuestas de los aspirantes al Parlamento y así evitar ser engañado con discursos populistas.