En una entrevista con la agencia internacional Reuters, Mercedes Aráoz afirmó que su toma de mando, al ser declarada presidenta de la República encargada, fue un mero acto político. Admitió que, pese a su nombramiento, no asumiría las funciones de jefe de Estado.
Aráoz reveló que Martín Vizcarra evaluaba no solo la disolución del Congreso de la República, sino incluso renunciar a la presidencia del Perú. Indicó que, aunque le encantaría conversar con Vizcarra, este le ha cerrado las puertas de Palacio de Gobierno.
Añadió que daría un paso al costado si el Congreso y el Ejecutivo voltean la pagina, y que en todo caso, respetara la decisión que tome el Tribunal Constitucional. Finalmente, cuestionó que tras la propuesta de elecciones generales, solo sea el Parlamento el que se vaya.