Un niño 10 años fue rescatado por los bomberos tras quedar atrapado entre las paredes de dos viviendas en el sector de Puente Piedra. El menor jugaba en el techo de su casa cuando perdió el equilibrio y cayó en un espacio angosto que separaba ambas construcciones.
PEQUEÑO VIVIÓ MOMENTOS DE TERROR
Al llegar al lugar, los bomberos intentaron inicialmente liberarlo por el techo, pero la estrechez del espacio y las heridas por fricción que comenzaba a sufrir el niño los llevaron a optar por una solución más compleja: perforaron una de las paredes con herramientas especializadas para acceder a él.
Durante toda la operación, los rescatistas se mantuvieron en contacto con el menor para mantenerlo consciente y tranquilo. Finalmente, tras varios minutos de trabajo, lograron sacarlo del lugar y trasladarlo a un hospital cercano.
Afortunadamente, el menor solo sufrió algunas raspaduras y no presenta lesiones graves. Según indicaron sus familiares, el niño solía jugar con frecuencia en el techo de su casa, pero es la primera vez que ocurre un accidente de esta magnitud.