El tráfico en la capital peruana ha empeorado debido a la combinación de las fiestas navideñas y una serie de obras de mejoramiento vial en los distritos de Miraflores, Magdalena, San Isidro y Barranco. Estas intervenciones, aunque necesarias, han generado malestar entre los conductores y vecinos por las restricciones y demoras que ocasionan.
MIRAFLORES
La avenida Comandante Espinar, desde Pardo hasta el óvalo Gutiérrez, se encuentra en reparación. Este trabajo durará cinco meses, afectando el tránsito en una vía clave del distrito.
En la quebrada de Armendáriz, la construcción de un puente que conectará Barranco y Miraflores mantiene parcialmente restringido el acceso al circuito de playas.
MAGDALENA Y SAN ISIDRO
La avenida del Ejército está siendo intervenida como parte de un plan metropolitano. Este proyecto afecta varios tramos en estos distritos, lo que ha complicado aún más la circulación.
En San Isidro, calles como Miguel Seminario y Micaela Bastidas permanecen cerradas, con reapertura programada para el 12 de diciembre.
BARRANCO
Además del puente en Armendáriz, otras zonas cercanas al circuito de playas presentan tránsito restringido, dificultando el flujo vehicular hacia vías rápidas.
El incremento del tráfico habitual de fin de año, provocado por las compras navideñas y visitas familiares, se ha intensificado por las restricciones viales. Conductores y vecinos han expresado su descontento, señalando que estas obras, aunque importantes, podrían planificarse mejor para evitar congestiones mayores.
Las municipalidades de Lima y los distritos involucrados han asegurado que las obras se entregarán dentro de los plazos establecidos, aunque algunos vecinos dudan de su cumplimiento. Mientras tanto, se recomienda a los conductores estar atentos a los desvíos y planificar rutas alternativas para reducir el impacto del tráfico.