La Municipalidad de Lima ha emprendido un vasto proyecto de restauración que busca revitalizar y recuperar las históricas casonas, iglesias, y calles del centro de la capital, con una finalización proyectada para el año 2035.
El proyecto, dirigido por Prolima bajo la gestión de Luis Martin Bogdanovich, incluye la restauración de emblemáticas estructuras como el edificio Giacoletti, dañado severamente por un incendio en 2018. A diferencia de Giacoletti, otros edificios como la casona en la Plaza Dos de Mayo, también afectada por un incendio en 2017, enfrentan complicaciones debido a que es propiedad privada, lo que limita la intervención estatal.
En enero de este año, se aprobó una ley que establece un régimen especial para el Centro Histórico de Lima. Esta normativa incentiva la inversión privada en la restauración del área, lo que permite a las empresas y personas naturales deducir hasta el 30% de su inversión en restauraciones del impuesto a la renta. Esta medida busca hacer de la capital un lugar atractivo para la inversión.
Además de la recuperación de estructuras históricas, el denominado como Plan Maestro implementado desde 2019 ha logrado peatonalizar 41 cuadras y recuperar seis plazas. Actualmente, se está trabajando en la restauración de la Iglesia de Buena Muerte, entre otros proyectos que forman parte de una estrategia a largo plazo para preservar y revitalizar a la Ciudad de los Reyes.
Cabe resaltar que, este ambicioso proyecto no solo busca restaurar la infraestructura física sino también fomentar un desarrollo integral y sostenible que beneficie tanto a los residentes como a los visitantes de Lima, con la promesa de un Centro Histórico completamente renovado para el año 2035, coincidiendo con el 500 aniversario de la fundación de la ciudad.