Los alrededores de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos se han convertido en una zona de alta inseguridad, donde estudiantes y comerciantes denuncian que son víctimas constantes de robos y asaltos a mano armada.
Las cámaras de seguridad de los negocios locales han logrado captar en varias ocasiones las acciones delictivas que ocurren en la zona. Un caso reciente se produjo en la cuadra dos de la avenida Universitaria, en frente de la casa de estudios. Una joven estudiante fue asaltada mientras caminaba y atendía una llamada en su teléfono móvil. Un hombre se acercó por detrás y aprovechó la distracción para arrebatarle el dispositivo y huir corriendo. Un cómplice lo esperaba a pocos metros, facilitando su escape.
Este no es un caso aislado. La zona está llena de negocios, restaurantes y librerías, que también han sido blanco de los delincuentes. Otra cámara de seguridad de una librería captó a un hombre robando un teléfono móvil que estaba a la vista. Sin ningún remordimiento, el sujeto tomó el dispositivo y lo guardó en su pantalón.
Además, se reportó un tercer caso en una cabina de internet, lugar frecuentado por muchos estudiantes. Un hombre fingió ser un cliente, notó la presencia de una laptop cerca de su asiento y, a pesar de estar rodeado de otros usuarios, logró sustraerla y guardarla en su mochila sin ser detectado. Estos hechos han generado una gran preocupación entre los universitarios, quienes se sienten vulnerables y piden ayuda para garantizar su seguridad.
Los estudiantes hacen un llamado a las autoridades para que tomen medidas y brinden más seguridad en la zona, por lo que solicitan la presencia de más efectivos policiales y medidas de vigilancia para proteger a la comunidad universitaria, que incluye no solo a los estudiantes, sino también a los profesores y trabajadores de la universidad.