La Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) denunció a la Municipalidad Metropolitana de Lima por retirar sin ningún motivo más de 700 separadores viales, que se encontraban instalados en la avenida Javier Prado oeste.
La ATU precisó que dichos divisores, que estaban instalados entre las calles Las Palmeras y Los Laureles, en San Isidro, eran utilizados para segregar la vía exclusiva del Corredor Rojo.
Indicó que el hecho ocurrió la madrugada del martes 26 de abril cuando personal de la comuna limeña, con la ayuda de un camión, llegó al lugar para retirar los separadores viales, cuya compra e instalación demandó un gasto aproximado de S/200,000.
SEPARADORES AHORRAN TIEMPO DE VIAJE
Este aislamiento del carril de los buses del Corredor Rojo tiene como objetivo brindar a los usuarios un servicio más rápido y eficiente y evitar el caos del tránsito en dicha vía. Estos separadores ahorran un total de 15 minutos de viaje a los pasajeros.
Hay que tener en cuenta que se trata de transporte público que beneficia a quienes no tienen vehículo propio para trasladarse a trabajar, estudiar y demás actividades. Esto perjudica a más de 100,000 viajeros que diariamente utilizan este servicio.