Los alrededores del Museo Nacional de Cultura, ubicado en el Cercado de Lima, está totalmente abandonado por las autoridades, pues se ha convertido en un urinario público, tiene pintas o grafitis y, además, sería guarida de ebrios e indigentes.
Según los vecinos, sujetos se acercan al museo para orinar en las noches. Por otro lado, prácticamente los alrededores también se han convertido en un basurero.
En esta zona también se encontró a un joven que habría sido ‘pepeado’, pues los vecinos lo encontraron tirado en la calle, por lo que dieron aviso a las autoridades. Otro flagelo que afecta a los vecinos es la proliferación de la prostitución en la zona.