El presidente electo de los Estados Unidos, Joe Biden, encabezó un homenaje a las 400 mil víctimas mortales del COVID-19 horas antes de su nombramiento como el mandatario 46 del país.
Biden, junto a su vicepresidenta Kamala Harris y sus parejas, se acercaron al monumento a Lincoln y guardaron silencio ante el estanque, que se iluminó con 400 luces representando las vidas perdidas.
En su primer acto en Washington DC, Biden recordó también a su hijo fallecido, y nominó a la primera mujer transgénero como subsecretaria de salud.