La construcción del muro fronterizo en los Estados Unidos ya es una realidad, aunque no es financiado por el gobierno, sino por una asociación privada. ‘Patriotas Constitucionales Unidos’ se encuentra conformada por veteranos de guerra y recibe donaciones de simpatizantes de Donald Trump.
El muro privado, que tendrá 800 metros de barrotes de acero, es levantado en el punto donde se unen los estados de Texas y Nuevo México, frente a Ciudad Juárez, en el estado mexicano de Chihuahua. Esta zona es usada frecuentemente por los migrantes para entrar al país.
Desde México los ciudadanos ya expresaron su rechazo. El fin de semana un juez federal bloqueó temporalmente los fondos que Trump había asignado al muro tras declarar emergencia nacional en febrero. El presidente solo ha conseguido la aprobación de 1.375 millones de dólares.
La cifra es lejana a los 5 mil 700 millones de dólares que había solicitado para la construcción de su polémica promesa de campaña.