Las personas mienten para quedar bien, para excusarse, para obtener lo que quieren, para no perder ciertos derechos, para dar una mejor imagen de sí misma, o simplemente por temor al rechazo o al castigo, pero la verdad es que las mentiras no son bien recibidas cuando se descubren sin importar cual sea la razón.
Las mentiras tienen patas cortas, dice el refrán, y es verdad, y que una consecuencia de mentir y hacerlo constantemente puede traer como consecuencia depresión, ansiedad y aislamiento, ya que es posible que las mentiras que decimos nos metan en problemas de los que nos sea difícil salir.
Y el engaño, la ciencia señala que “esta apunta a conductas que pueden presuponer tanto un contexto lingüístico como uno meramente práctico y que pueden ser tanto simples como muy complicadas; 'mentir' en cambio es un verbo reservado para cierta clase de acciones que sólo seres lingüistizados pueden efectuar”.
¿Cómo son realmente aquellos personajes polémicos que semana tras semana muestran doble faceta en nuestra televisión?, pero hay manera de saber si nos mienten, y nos referimos específicamente de Melissa Paredes, el Rodrigo “el Gato” Cuba, y otros personajes que nos pintaron una cosa y resultaron siendo otra, como el mismísimo expresidente Martín Vizcarra.
